ENTRE PILLOS ANDA EL JUEGO

Cuando empezó esta edición de GH Vip, decidí intentar dejar a un lado la imagen previa que tenía de los concursantes y analizar y comentar exclusivamente su comportamiento una vez comenzado el concurso, lo que ha resultado imposible, sobre todo, porque ni ellos mismos lo hacen. Utilizan continuamente su pasada “vida televisiva” para atacarse unos a otros, principalmente a Olvido, a la que todos (excepto Coman), con Belén Esteban al mando, le están haciendo la convivencia muy difícil, casi imposible. ¿Y qué es lo que ha hecho Olvido Hormigos? No someterse a los dictados de Belén y plantarle cara cuando lo ha considerado necesario. ¿Y quién es Belén Esteban para que todo el mundo le tenga que hacer la pelota? Aquí está el quid de la cuestión.

Belén Esteban es un auténtico fenómeno que, por mucho que a algunos nos resulte incomprensible, es cierto cómo la vida misma. Las audiencias, así lo indican y, ¿qué queréis que os diga?, me parece lamentable buscar audiencia a base de excitar el morbo, de hurgar en vidas ajenas que nada nos importan, en ver caras llorosas y escuchar siempre los mismos lamentos. A Belén Esteban la hemos visto reír, llorar, hablar de su pasado y de su presente, de sus novios, de sus separaciones y adicciones, y ella está abocada a continuar jugando el papel por el que le pagan, mucho por cierto, porque está comprobado que da audiencia. Cada cual tiene derecho a ganarse la vida cómo pueda y, en la medida de lo posible, cómo quiera, pero este tsunami de popularidad, que no de prestigio, absurdo y barriobajero en el que ha caído, acaba esclavizando y da lugar a que uno comience interpretando un papel y el papel acabe con uno. Se termina por no saber cuál es la raya que separa la realidad de la ficción, y lamentablemente eso es lo que estamos comprobando desde Gran Hermano Vip: Belén Esteban es ella misma las 24 horas del día, entre Belén como persona y la estrella televisiva no queda nada.

Criadas y señoras

Enfocada 24 horas al día por una cámara, Belén está en su hábitat natural y en ella se defiende como pez en el agua. Más bien, como un tiburón. No obstante, por algo es la reina de Sálvame. Pobre del que se cruce por su camino, porque Belén va a destrozarlo, sin miramientos ni contemplaciones. Y Olvido está en su punto de mira, soportando la embestida con valentía, sentido común, un poco de soberbia y mucha frialdad. Después de ser juzgada como madre, insultada, ninguneada y menospreciada por Belén y su séquito, a Olvido se le ocurrió, tras la gala del jueves, llamarla “criada” en una prueba semanal, donde precisamente Belén hacia ese papel, como el resto de su equipo, (aunque no voy a negar que su objetivo era “pincharla”), y contestarle “y tú otra cosa” después de que Belén insinuara que se le da muy bien beber (alcohol). Y se armó la marimorena. Belén Esteban volvió a deleitarnos con un auténtico festival de ordinarieces en la más pura esencia chabacana de la que hace gala habitualmente, y desde entonces arremete contra Olvido con continuas groserías, ordinarieces, salidas de tono y hasta muecas. Como no acepta que se le lleve la contraria, cuando esto sucede, intenta por todos los medios imponer su opinión, encoleriza e  intenta humillar a su víctima. Dice que en el fondo, muy muy muy en el fondo, le da pena Olvido. No lo creo, porque no percibo en ella ni la más mínima empatía. Dice que no quiere condicionar a los demás, pero no para de hacerlo. 

Lo peor es que ella misma se lo cree. Pienso que tiene la susceptibilidad por las nubes, más alta que el azúcar. Tiene la capacidad de transformar una conversación intrascendente en una tensa batalla. Una opinión, un comentario o incluso una simple mirada pueden bastar para prender la mecha. Y nunca es consciente de lo que dice o hace mal. No es capaz de hacerse la menor autocrítica y está siempre a la defensiva y con cara de pocos amigos. Se alimenta de la polémica y de los malos rollos, y lleva enfadada con el mundo tanto tiempo, que parece que no sea capaz de actuar de otra manera.

Víctor O'Hara en uno de sus días más tranquilos

Para colmo Belén ha encontrado un aliado, intuyo que poco fiel, pero que por ahora la apoya al 100%,  al que trata como a un súbdito a su servicio. “Cállate Víctor”, es la frase que más se repite en Guadalix. Víctor es un marujón, liante, desquiciado, bipolar, fantasioso, desmesurado, hiperactivo y, por lo tanto, un lujazo como concursante, por muy “megaperra” que llegue a ser. Su drama tras ser insultado por Los Chunguitos con ese ya mítico “Vuestro Dios, es mi Dios”, sus sentenciadoras opiniones sobre sus compañeros, la mayoría graves y sin fundamento alguno, que pueden variar en cuestión de segundos, su capacidad para estar en todos los saraos como por arte de magia y su talento para el melodrama, son impagables. 100% espectáculo. Imaginármelo cuando era millonario, déspota y creyéndose el rey del mundo, enamorado hasta las trancas de Nacho Polo, derrochando a tutiplén, y verlo ahora hundido, arruinado, degradándose en Sálvame, desesperado por volver a la televisión a costa de su propia dignidad y enganchado a ese guaperas que tanto le sigue gustando por mucho que lo niegue, loco por verlo entrar por la puerta de esa casa y compartir con él algo, aunque sean unas horas en un reality,…me enternece. Un poco. Además me está haciendo reír constantemente. No sé por cuanto tiempo, porque bastará creerse querido por el público, para que se le suba a la cabeza y se convierta en el divo insoportable y dañino que realmente es. 

Nevera de Guadalix traumatizada: "Me siento vacía"

Contra ellos, mi única esperanza además de Olvido, es Kiko Rivera, y los que, si éste da el paso, se pongan de su parte. Puede ser, primero, porque Belén le está tocando las narices con que come mucho, y para Kiko, a la vista está, con la comida no se juega. Y luego está el hecho de que Kiko pasa de todo, es más, “se la suda”, y no es el típico pelota. En sólo tres días y espatarrado por todos los sofás y sillones de la casa, con hambre y aburridísimo, ha vaciado la nevera y ha soltado dos o tres bombazos que los ha dejado a todos descolocados, dándoles continuamente información del exterior. Incluso se ha atrevido a aconsejar a Víctor Sandoval que no se deje tratar así (de mal) por Belén y ha confesado que le molestan los gritos de la de San Blas, quien como era de esperar cuando se enteró, estalló también contra él, teniéndolo ya en su punto de mira de forma irreversible. A pesar de ello, la sangre no ha llegado al río. Todavía. Kiko es “buenrollista” por naturaleza, un superviviente, no ha tenido más remedio que serlo (media España lleva cachondeándose de él toda su vida), y aunque no es un lumbrera, sabe de qué pie cojea cada uno y moverse más o menos por el medio, solucionar problemas y parecer simpático. Ojo, que es el hijo de la Pantoja y eso en el mundo del corazón es casi como tener un doctorado, y el rival más fuerte de la Esteban, una vez descartados todos los demás.

Porque Ylenia “encarpetada”, no nos sirve para nada. Necesitamos que Fede haga algo que la cabree mucho urgentemente. Ares es la metemierdas mayor del reino, pelota y creo que la primera en pasarse al bando de Kiko si se produjese la formación de un grupo contrario a Belén. A Coman habría que defenderle porque injustamente y sólo por el hecho de apoyar a Olvido, le están haciendo el vacío y tratándolo con muy malos modos. Pero cuesta porque es un coñazo. Laura, Fede, Israel y Aguasantas van al sol que más calienta, que por ahora es el de Belén. Y Sandro, que parece una mala copia de la Pantoja, con melenaza negra y algo siniestro, igual. Aún así llevamos una semana de concurso y han ocurrido más cosas que en las dos últimas ediciones de Gran Hermano juntas. Es un no parar. La lista de lo sucedido sólo en los últimos tres días (si no se me olvida nada, lo que es altamente probable) es la siguiente:

La casa en directo

Dos broncas tremendas entre Olvido y Belén. En una de ellas, Belén corrió como un luchador de sumo con tal velocidad hacia Olvido que pensé que le atizaba. No lo hizo, pero está en mejor forma de lo que imaginaba. 
Víctor pide la expulsión de Olvido. Le encanta rellenar solicitudes para expulsiones. Es su hobby preferido en todos los realities. 
Cruzada de Belén contra Kiko porque tuvo “el valor” de decir que le molestaban sus gritos. Por lo visto, están investigando si son la razón de que los canguros se hayan quedado sordos en Australia. 
Bronca Olvido-Víctor, por, según él, en una realidad paralela, la exconcejala intentar arruinar la vida a Belén ahí dentro. 
Bronca Olvido- Ares, que la acusa de “masturbadora”. Luego se disculpó con ella, pero dejándonos claro que sólo lo hacía por la palabra en cuestión. 
Bronca Víctor- Kiko, confesando éste último que se iba a fumar porque si no terminaba comiendo “maricón a la plancha”. Esperemos que no lo echen como a Los Chunguitos. Ni que se lo coma. 
Víctor contra Ares por el tema de Los Chunguitos, supuestamente los defendió en el confesionario porque no creía a Víctor. ¿Apostamos quién es más metemierdas de los dos? Está difícil, ¿eh? 
Conspiración Belén y súbditos contra Fede, porque pensaban que había nominado a la “jefa”. No tenían constancia alguna, aún así, lo sentenciaron y no lo cortaron a cachitos y se lo pusieron a Kiko de cena de puro milagro. 
Celos de Ylenia hacia Ares y desconfianza hacia Fede (con insultos incluidos como “pedazo de perra del infierno”). 
Carpeta Ylenia-Fede. ¿Alguien se los cree? 
Acoso y derribo contra Coman por: a) apoyar a Olvido, b) no contar lo de su enfermedad, c) ir en pelotas por el baño y d) ser Coman.  
Todos contra Olvido. Sospechan de ella hasta cuándo va a fumar. Belén: “¿Y ésta qué hace levantada y por qué va a fumar?” Todos locos por averiguarlo mientras Olvido saboreaba su pitillo. 
Belén, tras los brotes, con el azúcar en más de 400 y los de GH acojonados. 
Reunión pos-nominaciones en la que todos los del bando de Belén fueron obligados (casi a punta de “pistola”) a confesarlas, para comprobar a quiénes habían votado Coman y Olvido. 
Clan belenista con Israel, pasando de acusarlo de “alcohólico” a alabarlo por buena gente y no pedir su expulsión, todo con el fin de que se vaya Olvido. 
Belén e Israel malmetiendo a Ylenia sobre Fede, después de que se enrollaran. 
Víctor malmete a Laura, para que ésta se enfrente a Kiko. 
Víctor llama “mono” a Coman. “¿Su Dios no es el Dios de Víctor?” 
Ares anima a Fede a tener sexo en la casa con Ylenia.  Fede está con un sinvivir pensando qué es lo que sería mejor de cara a la audiencia. Está por llamar a Emma García. 
Belén se ha pasado todo el fin de semana, pidiendo a la audiencia que expulse a Olvido. ¿Le vamos a hacer caso?

Belén, si Olvido vuelve de la sala de expusión

Mientras tanto, todos sospechan y rajan de todos. Parece que estamos observando una pista de coches de choque, en la que algunos por “obra y gracia” de Mediaset tienen más fichas que otros. ¿Es genial o no?

Por último, este fin de semana Belén ha comenzado a amenazar con irse, por cualquier mínimo gesto que le ha hecho sentirse cuestionada. A ver qué se le ocurre a la cadena para retenerla y mantenerla contenta. Espero que no sacrifiquen a Olvido, porque sería un gran error de cara al concurso. Observar las caras de todos, especialmente la de Belén, cuando la vean volver a la casa, no tendría precio. Como tampoco lo tendrá, que todos empiecen a cuestionar si esta vez la princesa no tiene de su parte al pueblo, y se produzcan múltiples cambios de estrategia. Olvido debería quedarse, sí o sí. Aunque lo tiene difícil, 65.9 20.6 y 13.5 fueron anoche los porcentajes ciegos.

Mayra Gh